Ebook

Cómo era ser pequeño, explicado a los grandes

Los niños son inmigrantes en el tiempo. El libro describe la condición de ser pequeño, sea por edad (niño o anciano), por condición de desplazado o por vivir en los márgenes. Y cómo marca esa relación de fuerzas, ya sea autonomía o dependencia, de habilitación para actuar o de prohibición, independientemente de nuestras habilidades. Nos marca en relación a los demás (los fuertes), e incluso en relación a nosotros mismos.

 

Tantas veces se trata a niños y a ancianos como a inmigrantes sin papeles o, como hacía un país colonizador cuando llevaba la luz del evangelio al Nuevo Mundo, con la certeza de una verdad revelada. A su vez: los inmigrantes se convierten en niños al llegar a otra patria, así se sienten, así se los trata.

 

Quiero corregir un equívoco que hace que a un niño se lo trate como a un diminutivo de persona, al que se educa con un mundo en diminutivo.

 

Los chicos llegan a una sola cosa, vienen a comerse el mundo, y cuando se aburren o expresan resistencia es porque lo que se les ofrece los distrae, es un sustituto pobre, inútil para lo único a lo que llegaron, comerse el mundo.

 

De pequeños aprendemos a conocernos en el espejo de los demás, según cómo nos ven y responden. Creemos vernos a nosotros, en realidad vemos cómo nos ven. Como con todas las miradas, algunos ven bien y otros necesitan unas dioptrías que corrijan. De eso trata este libro, que da noticias sobre cómo es ser humano cuando todavía no sos considerado persona o cómo es ser persona cuando todavía sos un niño; pero también cuando dejaste de ser un adulto activo.

 

Tomando el estilo de ensayo autobiográfico de modelos como “Mal de escuela” de Daniel Pennac, “El hombre desplazado” de Tzvetan Todorov, y “Fuera de lugar” de Edward Said, describe de qué manera, a lo largo de toda la vida nos cuesta representarnos en otra edad. Como si pareciera mentira ser nosotros con otros años; de viejos: haber sido jóvenes; de adultos: que seremos viejos. A la vez, en esa demostración, tiende puentes con esas condiciones, proponiendo ejercicios de imaginación y empatía.

 

© Luis Pescetti

Comentarios

4 comentarios en “Cómo era ser pequeño, explicado a los grandes

  • Gerardo dice:

    Infinitamente gracias; cuando he pensado que seguir tus huellas sería reducirse a unos álbumes y uno que otro libro sales con algo más. Luis eres una persona que me aporta ganas de no quedarme sentado o bien, sí poder sentarse,pero pensando en qué hacer con la silla y las manos a la vez por ejemplo. ¡Que sigas siempre siendo un ejemplo!

  • Rosa Marcela Rodríguez Chachinoy dice:

    Es usted un gran artista, porque las letras son sus mejores obras

  • Nadith dice:

    Actualmente nos encontramos en una sociedad complicada, todos somos actores de una vida sin límites, los niños son una pieza fundamental en este teatro.

  • Roxana Quiroga dice:

    Que importante lo que decís Luis
    Ahora me toca ser directora de escuela y nos pido a nosotros mismos, porque me incluyo en esto, que miremos todo lo que hacemos con la perspectiva de nuestros niños!!!
    Muchas gracias por ayudarme con esto!
    Roxana

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *