1.
Mi propia vida que vivo
no es la vida que parece.
Yo vivo entre lo que vivo
y lo que les cuento a ustedes.
Y vivo más cuando cuento
cómo es la vida que hago.
Por fuera de ese relato
mi palacio es este cuarto.
2.
Sin nadie a quien contarle mis días
serían tan distintos a los que tengo.
Y no es una vida mala sin maquillaje de gente,
transcurre en las bambalinas de este invento.
Me levanto, me peino,
cuando camino arrastro un poco los pies,
hago un café, salgo al mercado,
regreso.
Ya no soy el que soy,
sino el que quiero que vean.
No miento,
sueño.
Mis padres iban al cine,
mi hermano creía que era Sandokán
mientras lo leía.
Yo elijo creer que soy
ese que les cuento.
© Luis Pescetti