Dí­gale no a la piraterí­a: regale su obra

Boletín 27

Piratería es copiar sin autorización, ¿cómo se llama cuando una productora “cajonea” a un artista? (deja de producir y distribuirlo, pero tampoco le devuelve sus contratos y derechos sobre su obra).

¿Y cómo se llama cuando un libro se descataloga? Uno que sigue teniendo lectores que lo buscan y necesitan, pero no los suficientes que esta época de novedades exige.

Es obvio que una cosa no justifica la otra, pero ¿cómo se llama la responsabilidad de impedir la circulación de un bien cultural?

Sobre eso trata el video de este rap que encontré en el blog de Luis Beltrán, y que me voló la cabeza: los nuevos paradigmas de producción y distribución que surgieron gracias a las nuevas tecnologías.

Una de las consecuencias es que la piratería creció en la medida de la digitalización. Ante esas prácticas uno puede poner un cartel “Dígale no a la piratería”, y sentarse a comprobar si el resultado es eficaz o estúpido.

Se lo puede ver como el “afán de maldad” de algunos, o como una respuesta del mercado ante problemas de costos altos, de distribución y de una nueva realidad tecnológica.
Cada uno sabe o intenta descubrir qué hacer frente a eso.

Cierta vez tuve la invitación de una gran discográfica para hacer una producción, el puro contrato era más largo que un guión de televisión. Decidí no firmarlo, preferí ser mi propio productor, como la mayoría de los cantautores infantiles. Tuve que aprender a hacer CDS, desde la grabación hasta la gráfica, hasta distribuirlos. El riesgo fue lograr un equilibrio y que la necesidad de gerenciar ese trabajo no robara tiempo al estudio y la creación; pero no hay más remedio si se quiere ser artista independiente. Lo contrario es ser artista-niño: un barniz de rebeldía detrás del cual se mueven y reproducen los intereses y las prácticas de siempre.

Podría decir que cuando vi que pirateaban mis discos decidí hacer algo. Lo cierto es que fue cuando descubrí que los regalaban en los cumpleaños a los niños. Sentí una gran responsabilidad y se me ocurrió que los CDS fueran con unos libros más atractivos, de modo que fuera un regalo “más gordo” que un mero disco.

Cuando Bocasucia y Qué público de porquería, estaban hechos advertí que eran menos pirateables pues la gráfica era más compleja. Eso fue una consecuencia posterior. Luego de charlar con Eduardo Abel Giménez decidí que a los mp3 de las canciones yo mismo los ofrecería en el blog.

Pero ese video de MC Lars invita a pensar más cosas.

La producción y distribución de contenidos sea hizo cada vez más individual, autonóma e independiente, y así saltea o pasa por debajo muchas barreras.
Casi de repente:
No hay que ser editor profesional para publicar.
No es necesario gastar dinero y se puede escribir, publicar y distribuir.
La relación entre quien produce y quien recibe no precisa de intermediarios.
Y todo esto se puede hacer gratuita y legalmente.

Es un enorme paso en el sentido de la producción independiente, y más que eso.

Un chico en su casa puede ser autor de su propio fotoblog, su página o su blog. Es dueño y titular de ese territorio.
Es cierto que eso conlleva muchos riesgos. Igual que salir a la calle, tomar la palabra.

Podemos hacer lo mismo que intentan las grandes compañías y comprar nuestro cartelito de dígale no a la piratería, quejarnos de que los chicos leen poco porque están demasiado frente a la pantalla, o intentar otras respuestas (¿se imaginan enseñarles a los chicos el lenguaje html? Ahí no hay errores de ortografía posibles: lo que escribís mal, se ve mal o no se ve).

Los chicos tienen un mayor dominio de la tecnología (y las habilidades y lenguaje que eso implica) que los adultos con los que se relacionan. Por lo general saben más que sus propios padres, sus docentes, sus pediatras, psicólogos, que los políticos y funcionarios de sus comunidades. Eso afectó la autoridad que tenía un adulto para habilitar al mundo.

Tal vez sea cierto que chicos y jóvenes empobrecieron su lenguaje, pero siempre me queda la duda respecto a qué época en la que el lenguaje cotidiano fue más rico.

Más bien me suena a: muchos adultos enojados porque los jóvenes no vienen a su fiesta de siempre, mientras tanto los chicos revolotean como locos frente a otros contenidos, guardados en otra parte y en un lenguaje que escapa a los adultos. Quizás ese lenguaje sea “más pobre” que lo deseable, pero más eficaz para el mundo que ellos perciben como real.

No hagamos como las discográficas porque los chicos van a terminar cantándonos un rap parecido a éste. En verdad ya lo hacen.

Luis Pescetti.


El video y el mp3 se pueden ver y bajar gratuita y legalmente.
Recomendamos muy enfáticamente ver el vídeo, porque sus imágenes cuentan aun más que la misma letra (que tomamos del subtitulado).

Bajar el mp3: click desde el sitio de su autor: MC Lars

Baja esta canción (rap)

Es 2006, y el consumidor sigue cabreado.
Ya no aguanto más así que estoy
haciendo una lista.

No intentes resistir el cambio de paradigma.
No se puede ignorar la revolución musical.

¿18.98 dólares un CD de Iggy Pop?
¿Y si lo puedo conseguir gratis de mi hermana?

Esto va de hacer marketing para Clive Davis, ¿verdad?
Si los fans se compran la camiseta consiguen el mp3.

La música era un producto, ahora es un servicio.
Discográficas, majors, ¿por qué quieren hacernos daño?

Epic se me encara: “No nos robes las canciones, Lars”,
mientras Sony vende las grabadoras que tuestan los CD-Rs.

Así que Warner, EMI, escuchadme bien
Universal Music, actualízate el chip.
Demandan a niños que se descargan los éxitos,
creen que es algo razonable
mientras saben que está mal.

Ey, Mr. Record Man nos reímos de ti,
llevando tu discográfica
como si fuera 1992.

Ey, Mr. Record Man tu sistema no puede competir.
Es el nuevo Modelo de Artista:
Transferencia de fichero: ¡Completa!
(File transfer: complete)

¡Descarga (baja) esta canción!
¡Descarga esta canción!
¡Descarga esta canción!

Ya sé que rimo de prisa,
pero el mensaje está claro.
No necesitas un millón de
dólares para lanzar una carrera

Si tu estilo es único
y practicas lo que predicas
Minor Threat y Jello Biafra
tienen algo que enseñar.

Tengo producción G5,
videos de concierto.
Hago giras con el portátil
ante salas repletas.

¿El contrato a la antigua con una compañía?
No tiene sentido.
¡Ser un siervo de la gleba tiene un costo inmenso!

Tienen el dedo en el dique
pero la grieta se expande.
No puedes vender agua embotellada
cuando fluye libremente.

Las ventas de discos se esfuman,
han bajado un ocho por ciento.
Suben de descargas, no se pueden impedir.

La radio por satélite y los videojuegos
han cambiado el paisaje, ya nada será igual.
¿Sabían que en diez años no habrá discográficas?
¡Adiós DVDs! ¡Adiós Compact Disks!

Ey, Mr. Record Man, ¿qué te has creído?
Sigues viviendo de tu catálogo del año 1982.

Ey, Mr. Record Man, tu sistema no puede competir
Es el nuevo Modelo de Artista:
Transferencia de fichero: ¡Completa!
¡Descarga esta canción!
¡Descarga esta canción!
¡Descarga esta canción!

Sabes, sólo queríamos un campo de juego nivelado (parejo).
Nos has cobrado de más durante años, y ahora
sólo queremos encontrar un equilibrio justo.
Odio decirlo, pero…
bienvenido al futuro.

¡Descarga esta canción!
¡Descarga esta canción!
¡Descarga esta canción!
Ey, Mr. Record Man nos reímos de ti,
llevando tu discográfica
como si fuera 1992.

Ey, Mr. Record Man
tu sistema no puede competir.
Es el nuevo Modelo de Artista:
Transferencia de fichero: ¡Completa!
La la la la… la la la…

Bajar el mp3: click desde el sitio de su autor: MC Lars

© Luis Pescetti

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